He pasado la noche en una tienda de ropa con dos desconocidos que tenian por mascota un cachorro de dragón. Era super cariñoso y volaba, pero a veces se pasaba de cariños y hacia daño.
Luego he estado en un campamento inundado por la lluvias, subida a una verja con mi familia fifticia desnuda, protestando por esta sociedad que erotiza el cuerpo y lo convierte en algo prohibido.
Que os parece mi noche?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)