Debía encontrar evidencias viajando al rededor del mundo. La pista más importante que encontraba eran unas piedras talladas que en realidad no eran piedras, sino cartones pintados de gris.
Los perdía porque me los robaban unos monitos muy pequeños y salían corriendo.
Lo siguiente que recuerdo es que iba por un bosque lleno de maleza, tanto que no podía andar, iba reptando. Me encontraba casas derruidas llenas de plantas y en una de ellas estaba María, que me advertía de que tuviera cuidado con las serpientes, porque las podía confundir con ramas, lo que me ha recordado a Indiana Jones.
Ha sido un sueño genial.
Los monetes molan ^^
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